Tributación de compras online: cambios en la legislación brasileña

En Brasil, las compras en línea han experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, impulsadas por la expansión del acceso a Internet y el aumento de la confianza en las transacciones digitales. Los consumidores brasileños recurren cada vez más a plataformas de comercio electrónico para adquirir una amplia variedad de productos, desde electrónica y moda hasta alimentos y productos del hogar.

Sin embargo, esta tendencia también ha generado preocupación en la industria local sobre la competencia desleal que estarían ejerciendo los proveedores extranjeros, a través de plataformas como Shopee, Shein y AliExpress, situación que ha llevado a debates sobre la implementación de políticas fiscales para proteger la producción nacional.

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Panorama del e-commerce en Brasil

De acuerdo con la encuesta TIC Domicilios 2023, realizada por el Centro Regional de Estudos para o Desenvolvimento da Sociedade da Informação (Cetic.br), el 84% de los domicilios brasileños tiene acceso a internet. Eso supone más de 178 millones de personas. Entre 2022 y 2023, el número de usuarios de internet aumentó en 7,1 millones, lo que representa un incremento del 4,1%.

El mercado del comercio electrónico continúa creciendo de manera significativa. En 2023, según datos de Statista, 116,1 millones de personas realizaron compras en línea, y el 50,4% de ellas utilizaron dispositivos móviles para sus transacciones. Se prevé que los ingresos alcancen los 38.290 millones de euros en 2024, un 17% superior al de 2023. Para el próximo lustro se esperan tasas de crecimiento anual superiores al 10%. Para 2029, se estima que el volumen de ingresos llegará a los 66.870 millones de euros.

Perfil del comprador online brasileño

La penetración de smartphones es un indicador clave para entender los comportamientos y hábitos de los consumidores en Brasil, así como el futuro del comercio electrónico en el país. Según E-commercebrasil, las ventas a través de dispositivos móviles alcanzaron los 12.000 millones de dólares en 2019, representando un 44,4% de las ventas online, mientras que las ventas desde ordenadores fueron de 15.000 millones de dólares. En 2021, el 54% de las ventas online se realizaron a través de dispositivos móviles, y se estima que en 2023 más del 60% de las ventas se efectuaron mediante dispositivos móviles.

Demográficamente, según datos de Statista, el rango de edad con mayor porcentaje de compradores online es el comprendido entre 36 y 50 años, con un 33.6%, seguido de los compradores entre 26 y 35 años, con un 33.2%. Los menores de 25 años representan el 18.9%, y los mayores de 50 años, el 15,1%.

El consumo medio del comprador online brasileño aumentó considerablemente según datos de RetailX disponibles en E-commercebrasil, el consumo medio aumento de 245 dólares (230 euros) en 2019, a 397 dólares (372 euros) en 2022. De este modo, en 2022 el e-commerce brasileño fue el que tuvo un mayor crecimiento en Latinoamérica.

En cuanto a los medios de pago, el más utilizado en e-Commerce es PIX, seguido de las tarjetas de crédito. Además, 6 de cada 10 compradores online realizan las compras con pago a plazos.

Tributación de las compras online

Con carácter general, la importación en Brasil de productos adquiridos en marketplaces se rige por las reglas de las Encomendas Internacionais de la Receita Federal (equivalente a la Agencia Tributaria en España). Estas reglas prevén un Régimen de Tributación Simplificado (RTS) que aplica, por defecto, a todos los envíos cuyo valor no supere los 3.000 dólares estadounidenses (sin tener en cuenta el valor del flete y del seguro). Este RTS comprende un tipo impositivo único federal del 60% que recae sobre los productos importados. Este porcentaje se aplica sobre el valor aduanero, lo que sí incluye el flete y el seguro. Adicionalmente, es de aplicación el Impuesto sobre Circulación de Mercancías y Servicios (ICMS), tributo de carácter estatal con un tipo impositivo que del 17% y que incluye en su base imponible el valor aduanero, una vez aplicados el valor del frete, seguro y tipo impositivo único.

Hasta 2023, Brasil eximía a las compras por debajo de los 50 USD de este tipo impositivo único, por lo que estos productos quedaban exentos de cualquier recargo tributario. Sin embargo, en agosto de ese mismo año se aprobó el programa Remessa Conforme, el cual establecía una serie de requisitos para poder beneficiarse de esa exención. Este programa también trajo consigo la aplicación del ICMS.

Ahora, tras la sanción de la Ley 14.902 de 27 de junio de 2024, las compras inferiores a 50 USD también pasan a soportar un 20% en concepto de impuesto a la importación (II, o arancel). Con esta nueva situación, los productos por debajo de los 50 USD pasan a tener una recarga tributaria que encarece el producto en aproximadamente un 44% sobre el valor aduanero, consecuencia de la aplicación de ambos tributos y del modo en que se calcula la base imponible del ICMS.

El proyecto de ley sancionado también prevé un descuento de 20 USD sobre los tributos resultantes de aplicar el tipo único federal del 60% (es decir, en las compras cuyo valor supere los 50 USD hasta el límite de los 3000 USD). De este modo, no solo se consigue el mencionado descuento de 20 USD, sino que también se reduce la base imponible sobre la que se aplica el ICMS.

Debate y expectativas

Con estas medidas, el gobierno busca proteger la industria nacional y aumentar los ingresos públicos. Sin embargo, esta situación ha generado un intenso debate en el ámbito político y económico. Sus defensores afirman que la medida podría equilibrar la competencia entre productos nacionales e importados, protegiendo a la industria local y generando más ingresos fiscales. Sin embargo, los detractores de la medida afirman que perjudica a los consumidores, especialmente a las clases más bajas que dependen del e-commerce para acceder a productos a precios más accesibles. Además, podría desincentivar la innovación y competitividad en el sector nacional, fomentando una dependencia en políticas proteccionistas en lugar de mejoras estructurales.

En cualquier caso, esta medida que se prevé entrará en vigor en agosto de 2024 es una realidad. El impacto de esta nueva política fiscal se observará en los próximos años, y mostrará si realmente logra los objetivos de protección industrial y aumento de ingresos sin perjudicar a los consumidores.

Para obtener más información sobre el comercio electrónico en Brasil puedes consultar nuestro Informe e-País de Comercio Electrónico en Brasil 2023 y si necesitas información adaptada a las necesidades concretas de tu empresa, no dudes en contactar con nuestra Oficina Económica y Comercial de España en Brasil.