Dafiti, reconocida plataforma de comercio electrónico especializada en moda y estilo de vida, comunicó recientemente su retiro del mercado chileno. La empresa, que inició sus operaciones en el país en 2011, argumentó que "cambios significativos en el entorno empresarial" y una "disminución considerable de su escala y participación de mercado" fueron determinantes en esta decisión.
Fundada en Brasil en 2011 por Philipp Povel, Malte Huffmann, Malte Horeyseck y Thibaud Lecuyer, Dafiti buscaba revolucionar la forma de consumir moda en América Latina. Con el tiempo, expandió sus operaciones a varios países de la región, incluyendo Chile, donde llegó a emplear a más de 400 personas y atrajo inversiones por aproximadamente US$275 millones de dólares de inversionistas como Rocket Internet, JP Morgan y Ontario Teachers Pension Plan.
Durante la pandemia de COVID-19, el comercio electrónico experimentó un auge significativo, y Dafiti no fue la excepción. Sin embargo, con la normalización post-pandémica, la empresa enfrentó desafíos para mantener su posición en un mercado cada vez más competitivo. La entrada y consolidación de gigantes como Mercado Libre y Falabella, con estrategias agresivas y una logística eficiente, incrementaron la presión sobre Dafiti.
Analistas destacan que, a diferencia de otras plataformas, Dafiti no logró consolidar una logística eficiente ni una estrategia clara de fidelización de clientes, factores clave en el éxito del e-commerce en Chile. Su salida refleja la creciente presión del mercado y la necesidad de que las plataformas online locales fortalezcan su propuesta de valor para competir con actores más establecidos. Además, deja algunas enseñanzas para las empresas que operan en el sector del comercio electrónico:
- Importancia de la adaptación: Es esencial que las empresas adapten sus estrategias a las dinámicas cambiantes del mercado y a las preferencias de los consumidores, invirtiendo en tecnología y logística para mejorar la experiencia del cliente.
- Diferenciación como clave del éxito: Contar con una propuesta de valor única y estrategias de fidelización efectivas puede marcar la diferencia en un mercado saturado.
- Eficiencia operativa: La inversión en infraestructura logística y la optimización de procesos son fundamentales para competir con actores establecidos que ya cuentan con sistemas eficientes.
- - Diversificación y flexibilidad: Explorar múltiples canales de venta y mantener una estructura de costos flexible puede ayudar a las empresas a adaptarse a fluctuaciones del mercado y a enfrentar desafíos económicos inesperados.
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