El metaverso lleva tiempo dando que hablar, pero la forma en que afectará al comercio minorista tal y como lo conocemos es asombrosa. La posibilidad de ofrecer productos en un entorno virtual con la comodidad de la compra en línea y la opción de evaluar de cerca los artículos renueva las oportunidades para los minoristas electrónicos.
El comercio minorista ya ha visto cambios tan drásticos en la última década, pero una estrategia de adaptación tendrá que estar en su mente cuando entre el Metaverso.
La brecha entre el mundo real, o brick-and-mortar, y el mundo digital, o eCommerce, no hace más que aumentar. Entrar en una tienda para poder tocar físicamente los productos o interactuar con los asociados que venden está siendo sustituido por la comodidad, el acceso y la rapidez de las compras en línea.
Lo que el metaverso ha venido a combinar es lo mejor de ambos mundos para crear una experiencia totalmente nueva que, de nuevo, redefinirá el significado de las compras. Las nuevas tendencias trabajarán con los avances tecnológicos para fusionar lo físico y lo digital, y el comercio minorista no es una excepción.
El metaverso se ha hecho popular para crear una inmersión en un mundo virtual donde no existen las barreras geográficas, donde es posible ir a cualquier lugar, como parques, oficinas, fiestas y tiendas.
Debido a su exposición global y a su capacidad para interactuar visualmente con las personas y los bienes de consumo, grandes empresas, como Mango, Ralph Lauren o Ikea, están apostando por esta nueva tendencia.
La entrada de importantes compañías y la posibilidad de visualizar los productos en realidad aumentada pueden transformar el metaverso en una vía para el e-commerce.
Combinando la comodidad de la compra en línea con la posibilidad de evaluar el artículo de cerca, aunque sea virtualmente, una nueva forma de consumo a través de Internet puede ganar adeptos.
La relación entre el e-commerce y el metaverso, donde las compras son casi físicas, puede abrir nuevas puertas a las empresas que decidan participar en este mundo virtual.
La construcción de comunidades más fuertes y comprometidas es una de las posibles ventajas de esta relación, siempre y cuando no se reproduzcan los moldes utilizados actualmente en el comercio online.
Otra ventaja está relacionada con la línea de producción de las empresas, siendo especialmente válida para las que producen bienes de lujo. Es factible utilizar el metaverso como zona de pruebas para nuevos productos y recoger las opiniones de los consumidores.
Los ejemplos de esta visión ya están cobrando vida. Amazon ha integrado Room Decorator, su nueva herramienta de compra de RA que permite recrear digitalmente tu espacio para ver qué muebles o decoración funcionarán mejor. También Warby Parker, la empresa de gafas, permite probarse virtualmente varias monturas antes de realizar la compra.
La previsión es que el comercio electrónico se acelerará debido a los rápidos cambios que se están produciendo en el espacio. Las nuevas tendencias permitirán que los clientes se sientan más seguros en una compra realizada virtualmente frente a la sensación de tener que probarse, sentir o ser atendidos para comprar el mismo producto en persona.
El descubrimiento de productos y la personalización también se acelerarán. La tecnología metaversa permitirá a las marcas ofrecer a los compradores una experiencia digital altamente personalizada.
La brecha que ha existido entre otras tendencias sociales y el comercio minorista se cerrará aún más, ya que los aspectos sociales de las compras en persona se ofrecerán en línea. A menos que el comercio tradicional encuentre alguna forma de ofrecer una experiencia única que atraiga a los clientes presenciales, lo digital continuará creciendo mientras que la tendencia opuesta puede llegar a reducirse.