Estaba previsto que la normativa actual expirase a finales del año pasado, hasta que se produjo la extensión del periodo de transición hasta finales de 2018. Esto significa que los productos importados mediante comercio electrónico transfronterizo siguen siendo considerados comercio personal en lugar de calificarse como bienes para distribución comercial, lo cual permite a empresas extranjeras evitar los complejos requisitos del registro local.
La ampliación de la normativa se aplica a productos exportados a depósitos aduaneros de China antes de que se produzca su venta en los e-commerce, y también a los que adquieren los compradores daigou transfronterizos antes de que se vendan a consumidores chinos. El término daigou se refiere a un sistema ilícito de compraventa mediante el cual una persona que se encuentre en China pide a otra que le compre algo desde el extranjero y se lo envíe a China.
Sin embargo, Damon Paling, principal responsable del comercio neozelandés, dijo en la Cumbre de Productos Naturales para la Salud de Nueva Zelanda (Natural Health Products New Zealand Summit), que consideraba que aún era demasiado pronto para estimar lo que ocurriría a finales de año en torno a la normativa de comercio electrónico transfronterizo con China.
Paling declaró que la extensión de la norma ha proporcionado un poco de estabilidad, pero que aún debemos aguardar a ver qué ocurre en los próximos meses y que espera que siga habiendo acceso al e-commerce transfronterizo durante 2019, pero que siempre cabe la posibilidad de que se produzca un aumento en la dificultad y en los costes necesarios para llevarlo a cabo.
Oportunidades verticales
En lo que a montar un e-commerce en China respecta, Paling, que actualmente trabaja en Shanghai, explicó que las empresas no tenían que resguardarse obligatoriamente en las figuras principales, TMall y JD. “Entrar y hacerse notar en dichos gigantes puede resultar difícil, en especial para las PYMES, a las que puede interesar más fijarse en portales especializados más pequeños y de contenido vertical o entrar mediante un laboratorio químico (en el caso de las empresas de productos fitosanitarios).
Más allá de la normativa y del e-commerce, Paling comentó que la creciente tendencia de los consumidores y del gobierno a preocuparse por este tema tendrían como consecuencia un incremento en las oportunidades para las empresas de suplementos alimenticios. Según el ponente, 115 millones de personas en China tienen diabetes de tipo 2 en la actualidad y ya se han encontrado tendencias a padecer diabetes en el 50% de la población. Los productos para la salud del corazón, para dormir y para la digestión son de los más populares en la TCM (Traditional Chinese Medicine) y los derivados de plantas enriquecidos con proteína se estaban volviendo muy populares entre los jóvenes del género masculino, así como los suplementos de calcio y las vitaminas. Esto puede suponer una oportunidad excelente para las empresas españolas interesadas en exportar este tipo de productos a China.
Fuente: nutraingredients-usa.com