El año 2020 pasará a la historia como el año de la COVID-19. Esta crisis sanitaria ha supuesto un cambio radical de paradigma en el que el sector retail ha sido uno de los más afectados. En las circunstancias actuales, se enfrenta a grandes desafíos, pero también a un abanico inmenso de oportunidades que debe saber aprovechar.
En los últimos meses se ha producido un incremento de hasta un 55% en el comercio online a través de dispositivos digitales. Los usuarios de hoy en día emplean tanto los canales online como los offline para efectuar una compra. Actualmente, el sector retail se enfrenta a una época llena de retos en la que, además de haber sufrido el cierre de los comercios, ha aumentado la desconfianza general de la población a la hora de acudir presencialmente y, sobre todo, el hecho de los aforos limitados ha provocado una disminución del tráfico físico en las tiendas. Con restricciones cada vez más importantes en algunas Comunidades Autónomas, la computación en la nube es una estrategia comercial cuyo uso empieza a ser obligado para dar visibilidad a los productos y servicios que ofrecen los comercios.
Dada la relevancia que está adquiriendo el sector online, para los retailers es importante contar con las herramientas necesarias que les ofrezcan la conectividad necesaria que ayude a garantizar una buena visibilidad en el entorno online, sin dejar de lado las posibilidades que sigue ofreciendo el mundo offline. Los retailers deben de ser capaces de gestionar el inventario y dar datos reales cuando la oferta se produce a través de varios canales. Es importante que las tiendas físicas y la parte de ecommerce estén perfectamente conectadas y alojadas en un único software de gestión para garantizar información real de la situación del inventario. Entre las mejores opciones en el mercado, destaca Openbravo OMS, una solución omnicanal para gestionar pedidos online que facilita a los minoristas tener una visión global del estado de todo el inventario, permitiendo gestionar, vender y preparar los productos a través de los canales tanto físicos como digitales.
En palabras de José Alarcón, director de ventas de Iberia y Sur de Europa de la marca: “Estamos ante un punto de inflexión para el sector retail en el que el comercio electrónico va a adquirir una mayor relevancia tanto para los minoristas como para los usuarios. Las empresas deben de estar preparadas para poder ofrecer este tipo de servicios y, sobre todo, será imprescindible que exista una conectividad a tiempo real entre los datos que se reflejan en la nube y los reales que se encuentran en el inventario físico de la tienda”.
Además de facilitar la gestión del inventario, este tipo de computaciones en la nube ofrecen una serie de ventajas que ayudarán a los minoristas a ofrecer una atención personalizada al usuario, así como acceder fácilmente y de manera inmediata a los datos de compras para consultar el histórico de pedidos, independientemente del canal a través del cual se haya efectuado la compra. Además, este tipo de software genera recomendaciones acerca de productos similares o promociones vigentes en ese momento con el objetivo de garantizar una experiencia de cliente aún más personalizada.
Las empresas del sector retail deben saber adaptarse a los nuevos tiempos, aprovechando todas las tecnologías disponibles para crear una nueva experiencia de usuario.