
Silvia Haro Cabas
CEO & Co-Founder de e-PhotoPro
En 2017, en España se consolidó el comercio online siguiendo un constante crecimiento y convirtiendo a nuestro país en el cuarto de Europa en cuanto a volumen de transacciones.
En este escenario, surge una creciente preocupación por parte de las empresas en acertar con su estrategia por diferenciarse de la competencia.
La experiencia de compra es uno de los puntos determinantes tras el posicionamiento en los buscadores y canales de obtención de potenciales clientes. Tras esa barrera, la confianza del cliente se gana a través de ciertas claves que culminan en una venta.
Una tienda online tiene dos elementos iniciales que crean un clima de confianza de cara al potencial cliente: las imágenes y la información.
En este caso focalizaremos sobre las imágenes. Son nuestra carta de presentación. Nuestro escaparate.
Todas las empresas que han tenido un negocio tradicional han dado una importancia máxima a sus escaparates. Sabían como nadie que, sin una buena exposición de sus productos nadie se pararía ni entraría a comprar. Esto sucede la misma manera en el ecommerce. Si no hay un buen escaparate no hay cliente.
Las fotos son determinantes en este aspecto. Una buena imagen aumenta el ratio de entrada en nuestra tienda online. Y es crucial para marcar la diferencia entre la compra y la migración hacia tu competencia. Una foto profesional aumenta la credibilidad y es proporcional a la calidad que percibe el cliente de nuestros productos.
Los beneficios de tener una buena fotografía son incontables pero destacamos los más importantes:
Sin duda, una buena imagen no sólo es una buena carta de presentación sino imprescindible y decisiva para la buena marcha de una tienda online.
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